COSMETOLOGÍA
Desde que se tiene conocimiento del uso de los primeros cosméticos hasta nuestros días, son sorprendentes los cambios que se han realizado. Desde el uso de productos naturales, pasando por la alquimia hasta la moderna industria química, pero nos sorprendería también las similitudes que permanecen en el transcurso de los siglos.
Las primeras civilizaciones ya tenían cultura de cuidados de la piel, para mantenerla joven y para embellecerla.
En el antiguo Egipto ya se elaboraban y utilizaban para el cuidado del cuerpo: plantas, aceites, harinas, arcillas, grasa de origen animal (quien no ha oído hablar de los baños de Cleopatra en leche de burra). Algunos ingredientes siguen siendo utilizados en la industria actual. Igualmente se sabe que era corriente su uso en las culturas Griega y Romana.
Mas tarde en el renacimiento Siglos XVII- XVIII los cosméticos se utilizaban tanto por mujeres como por hombres de la alta sociedad, su objetivo mantener la piel cuanto más blanca mejor, eso marcaba un estatus social, era una demostración de que no trabajaban al aire libre como lo tenía que hacer resto del pueblo.
En el siglo XIX se pone de moda una imagen más natural, llegando a tener las mujeres un aspecto enfermizo.
Y ya por fin en el siglo XX la cosmética deja de ser un lujo de uso exclusivo para las clases altas y se generaliza su uso, no solo como símbolo de belleza sino también de salud e higiene
Hoy en día es una industria con un importante valor económico donde igual nos encontramos laboratorios pequeños y verdaderos holding que mueven millones de euros a nivel mundial.
La ciencia cosmética está en continua evolución. Hoy tratamos la piel respetando su estructura y necesidades. Tenemos productos para mejorar cada problema, o simplemente para la prevención, la salud y el embellecimiento.
Nuestro país hoy es puntero en esta industria, a la vez que tenemos a nuestra disposición todos los conocimientos y novedades a nivel mundial.
Hemos mejorado e innovado en productos y sobre todo nosotras como profesionales hemos mejorado nuestros conocimientos.
Podemos decir con orgullo que estamos en el mejor momento de la historia como profesionales de la estética.